viernes, 30 de noviembre de 2012

El retorno del autoritarismo del PRI en la administración pública federal

El politólogo Robert A. Dahl argumentaba que la organización de la administración pública respondía al poder político. En México el Servicio Profesional de Carrera de la Administración Pública Federal (SPC), con todos sus defectos institucionales, representa un mecanismo para hacer al aparato burocrático mexicano más técnico y eficiente, y a la vez diseminar el monopolio del poder político. Sin embargo, el PRI en alianza con el PVEM han resucitado la iniciativa que se promovió en el 2006, en donde se señala que los puestos de director general, por ejemplo, que maneja presupuestos y mecanismos administrativos que se traducen en control político, queden fuera de las evaluaciones de carácter técnico del Servicio Profesional de Carrera de la Administración Pública Federal. Así, estos puestos burocráticos quedarían en los téntaculos de poder del PRI, esa vieja ala autoritaria que lo caracteriza está de regreso en México. Como bien observa el CIDAC:


“Más allá de la discusión presente, esta iniciativa en los albores del regreso de un gobierno del PRI a Los Pinos, tiene una importancia simbólica mayúscula. En el pasado, una de las características de los gobiernos de aquel partido era exactamente la tradición del “quítense todos que llegan los nuevos”; es decir, que cuando gana un candidato gana su equipo y se gana todo, posiciones en el gobierno incluidas. Esta es una de las connotaciones negativas que carga el “viejo” PRI en sus espaldas. El “nuevo” PRI debe repensar, junto con la ciudadanía, si el regreso de estas prácticas no es más problemático que su abandono. El presidente electo ha llegado bajo la marca de un hombre que cumple compromisos. En los próximos días veremos qué clase de compromisos son los que pretende honrar, sobre todo en lo referente a la distribución y asignación de cargos. En estos menesteres, siempre hay una mezcla entre hacerlo con criterios de eficiencia operativa, por un lado, y de carga política, por el otro. La diferencia la hace la proporción en la cual se mezclan dichos elementos de la fórmula. ” (Fuente: CIDAC).

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Sobre Timothy Garton Ash

Imagen: Torre de Babel de Pieter Bruegel


El historiador de la “historia del presente” Timothy Garton Ash ha publicado en el New York Review of Books un interesante ensayo sobre la libertad y la diversidad en las sociedades actuales. En polémica con el multiculturalismo Garton Ash argumenta en clave liberal un pentagrama de virtudes para la libertad en la diversidad: inclusión, claridad, consistencia, firmeza y liberalidad. Garton Ash escribe desde las esferas de la teoría política y la historia del presente. (Una lectura encontrada en el blog de Jesus Silva-Herzog Márquez).


jueves, 15 de noviembre de 2012

Sobre "El nuevo paradigma mexicano" de Héctor Aguilar Camín y Jorge G. Castañeda

El ejercicio de la crítica sobre los abusos de poder político y económico del régimen autoritario del PRI, en las décadas de mayor abuso institucional  de los setenta y ochenta, fue denunciado por Octavio Paz, Gabriel Zaid y Enrique Krauze. Desde una visión universal de las ideologías, Octavio Paz exigía como higiene moral de la vida pública mexicana un examen de conciencia -en el sentido cristiano del término-, a quienes con sofismas repudiaban de las libertades políticas y económicas. Recuerdo lo anterior al leer el reciente artículo de Héctor Aguilar Camín y Jorge G. Castañeda, El nuevo paradigma mexicano, publicado en la revista Nexos. Convertidos al liberalismo más ortodoxo, Héctor Aguilar Camín y Jorge G. Castañeda, quienes en el pasado inmediato de la vida pública mexicana defendían justamente lo contrario a sus diez mandamientos liberales. En ese sentido, Octavio Paz y Enrique Krauze, son la vena liberal -entiéndase fundamentalmente el liberalismo político- más consistente y que en los tiempos nublados de la cultura política mexicana hablaron de la democracia sin adjetivos, entendida en su dimensión política y no en el lenguaje económico en que ahora hablan Héctor Aguilar Camín y Jorge G. Castañeda.

jueves, 8 de noviembre de 2012

El crimen organizado, el lavado de dinero y la comunidad política global: el caso del narcotráfico en México, 2000-2012

El crimen organizado, el lavado de dinero y la comunidad política global: el caso del narcotráfico en México, 2000-2012*


Noé Hernández Cortez**


Introducción


Una lectura sociológica sobre las consecuencias de la modernidad es que la incertidumbre y el riesgo caen como una sombra en los horizontes materiales y espirituales de la miseria humana (Giddens, 1993; Giddens, 1996). En esta nueva lectura de la modernidad la comunidad global juega un papel central, pues, los estados-nación interactúan en un entramado institucional y simbólico cada vez más complejo, si bien podríamos decir que es un proceso en construcción mediado por nuevas formas sociopolíticas de comunicación entre los individuos, las corporaciones y los estados, también podemos señalar que es un proceso con nuevos escenarios en donde la violencia del terrorismo y el crimen organizado en el orden global florecen como la sombra que cubre la miseria humana en la modernidad (Mittelman y Johnston, 1999). Así la sociedad del riesgo , como bien la identificó en su momento Ulrich Beck (2003), ha engendrado formas más sofisticadas de operación por parte del crimen organizado como es el lavado de dinero a través de las redes financieras del capitalismo,  esta arquitectura financiera global fue promovida de manera intensiva por las políticas neoliberales a partir de la década de los ochenta, en ese sentido de manera paradójica los sistemas financieros internacionales no han creado los mercados eficientes que se esperaban,[1] sino más bien el cobijo legal para las transacciones monetarias producto del tráfico de armas, seres humanos, drogas y piratería (UNESCO, 2002).


En este escenario global y con las claves sociológicas del riesgo y la incertidumbre exploramos el fenómeno del crimen organizado en México, en específico las redes del narcotráfico que han incrementado el número de muertos por métodos de violencia física con rasgos de sadismo y sin miramientos hacia la dignidad humana, dicho incremento del número de muertos se ha dado principalmente en los últimos gobiernos de derecha en México, que ascendieron al poder en el 2000. Por otra parte, se intenta explorar también en el presente proyecto de investigación el orden simbólico de los lenguajes que usa el crimen organizado y los medios financieros que utiliza para realizar sus transacciones monetarias, cuyos beneficios son obtenidos por la venta de diversos tipos de drogas en el mercado subterráneo mexicano y en las “exportaciones” o el “tránsito” de las mismas hacia el mercado de los Estados Unidos[2]. La porosidad del sistema financiero mexicano permeado por el crimen organizado es un síntoma más de la carencia de la autoridad legal (Weber, 1993)  del estado mexicano en la era de la globalización y del orden económico neoliberal. Ambos aspectos, tienen consecuencias sociales, políticas y simbólicas en el deterioro de la legitimidad del Estado mexicano. En este contexto, las consecuencias que actualmente observamos, más allá de las políticas de seguridad emprendidas por el gobierno mexicano, es que un estado sin capacidad de autoridad legal abona a la erosión de la cohesión social. En ese sentido, lo que se vive actualmente en México son los embates de la lógica del crimen organizado en sus dinámicas propias de un mundo globalizado, por eso el estudio sociológico del fenómeno requiere una reflexión desde una mirada global.


Política pública, legitimidad política y lavado de dinero


Los estudios actuales sobre el crimen organizado en México tienden a tener como objetivo la formulación de políticas públicas de seguridad (Buscaglia y van Dijk,  2003), sin lugar a dudas que la crisis de seguridad en México ha orientado las investigaciones académicas hacia la política pública de seguridad. Sin dejar de ser relevante este enfoque, consideramos que una comprensión a partir de las categorías de la sociología que ha reflexionado sobre el terrorismo y el crimen organizado en el nuevo orden global son claves analíticas importantes para comprender el entorno mexicano desde esta perspectiva teórica y empírica, pues una dimensión sociopolítica del problema del crimen organizado en México y sus prácticas de lavado de dinero nos puede dar una comprensión cabal sobre la dimensión global del problema[3] y sus efectos en la legitimidad de la autoridad legal del Estado mexicano, así como la pertinencia de pensar el problema de la crisis de la cohesión social en México.


Hipótesis tentativa


En el presente proyecto de investigación exploramos una hipótesis tentativa que consiste en argumentar que las instituciones financieras como parte del marco legal del estado, juegan un rol fundamental en la legitimidad estatal, pues cuando dichas instituciones financieras son permisivas y condescendientes con prácticas de lavado de dinero detona un fuerte cuestionamiento a la autoridad legal del estado, así como refleja en términos simbólicos problemas como la ausencia de la autoridad del gobierno, enviando señales, por una parte, al crimen organizado sobre la fragilidad simbólica e institucional del estado mexicano y por otra parte crea un ambiente de incertidumbre en la sociedad civil. De tal modo, que un estudio desde el ámbito de la sociología nos puede dar luz sobre las dimensiones del problema de lavado de dinero por parte del crimen organizado no solo para el orden económico, sino más también para el orden sociopolítico en sus aspectos simbólicos y sociales.


Preguntas de investigación


El presente proyecto de investigación tuvo su origen en un conjunto de preguntas desde una mirada sociológica. En primer lugar al revisar que en la literatura de la ciencia política está ausente el estudio sistemático del crimen organizado, al privilegiar modelos que se apartan de la realidad (Harasymiw, 2003), nos llevó a indagar en las categorías analíticas de la sociología, observando que existe un campo de investigación por explorar desde esta perspectiva para comprender la dinámica del crimen organizado en México y sus redes de corrupción y criminalidad que se extienden al aparato estatal y de manera más cruenta a la desamparada sociedad civil. En ese sentido, para orientar nuestra investigación nos hemos hecho un conjunto de preguntas ¿Cómo nos puede auxiliar un enfoque  teórico y empírico desde la dimensión del nuevo orden global  para comprender las dinámicas del narcotráfico en México? ¿Cómo impacta en toda su complejidad sociopolítica la debilidad de la autoridad legal del estado mexicano para contener la lógica ilegal del crimen organizado? ¿Qué dimensiones simbólicas se crean a partir de la penetración del crimen organizado a las instituciones financieras y estatales?


Por otra parte, consideramos que una investigación sobre el crimen organizado, el lavado de dinero y la lógica global desde la óptica de la sociología puede aclarar otros problemas que no se han explorado en México, a saber: ¿el neoliberalismo en México al abrir los mercados sin una fuerte regulación ha permitido que el crimen organizado tenga canales institucionales globales para ser más eficientes en sus negocios ilícitos? ¿Hasta dónde es responsable el gobierno de la derecha en México por abandonar una política de estado, y privilegiar una política de mercado? ¿Estás políticas de mercado emprendidas por el gobierno mexicano hasta donde son responsables de la crisis de cohesión social que padece la sociedad mexicana? ¿Cómo se construye el imaginario colectivo de riesgo e incertidumbre cuando el estado abandona su principal vocación de proporcionar seguridad al privilegiar la política de mercado?


Metodología


Las técnicas de investigación para el presente proyecto de investigación se realizarán a través de una triangulación de técnicas cualitativas y cuantitativas, poniendo énfasis en la interpretación de las acciones de los actores sociales. Para ello se llevarán a cabo investigación hemerográfica, entrevistas a profundidad y las comparaciones estadísticas sobre el comportamiento del crimen organizado en otros países, fundamentalmente en las dimensiones del narcotráfico y el lavado de dinero a partir de la información disponible.

Referencias bibliográficas


Beck, Ulrich, 2003, Risk Society. Towards a New Modernity, London, Newbury Park, New Delhi, SAGE Publications.

Brien,  Nicolas, Kim Danh, María Fernanda Estrada, Julieta Mejía Ibañez, Max Risch y Maureen Tee, “A Bilateral Study on Money Laundering in The United States and Mexico”, Working Paper, COLUMBIA/SIPA School of International and Public Affairs, Global Financial Integrity., pp.v-67.

Buscaglia, Edgardo y Jan van Dyck, 2003, “Controlling Organized Crime and Corruption in the Public Sector”, en Forum on Crime and Society , vol. 3, números 1 y 2, pp.3-34.

Giddens, Anthony, 1993, “Modernity, history, democracy”, en Theory and Society, núm. 22, pp. 289-292.

Giddens, Anthony, 1996, The Consequences of Modernity, Reino Unido, Cambridge, Polity Press.

Harasymiw, Bohdan, 2003, “Putting Organized Crime in its Place …within Political Science”, Paper preparado para el annual meetings of the Canadian Political Science Association, Dalhousie University, Halifax, Nova Scotia.

Mittelman, James H. y Robert Johnston, 1999, “The Globalization of Organized Crime, the Courtesan State, and Corruption Civil Society”, en Global Governance, vol. 5, núm. 1, pp.103-126.

UNESCO, 2002, “Globalisation, Drugs and Criminalisation. Final Research Report on Brazil, China, India and Mexico”, en The Economic and Social Transformations Connected with The International Drug Problem (http://www.unesco.org/most/globalisation/drugs_1.htm).

Weber, Max, 1993, Economía y Sociedad, México, Fondo de Cultura Económica.

Woods, Ngaire, 2010, “Global Governance after the Financial Crisis: A New Multilateralism or the Last Gasp of the Great Powers”, en Global Policy, enero, vol.1, Issue 1, p


*Avance de investigación sobre El crimen organizado, el lavado de dinero y la comunidad política global: el caso del narcotráfico en México, 2000-2012.
**Noé Hernández Cortez es Doctor de Investigación en Ciencias Sociales con Mención en Ciencia Política por FLACSO, Sede México. E-mail: noe.hernandez@flacso.edu.mx

[1] Por el lado del orden económico la crisis financiera global ha orillado a que se realice un nuevo replanteamiento sobre la gobernabilidad de las instituciones internacionales financieras. Véase: Ngaire Woods, 2010, “Global Governance after the Financial Crisis: A New Multilateralism or the Last Gasp of the Great Powers”, en Global Policy, enero, vol.1, Issue 1, pp. 51-63.
[2]En un estudio de mayo del 2011 Nicolas Brien, Kim Danh, María Fernanda Estrada, Julieta Mejía Ibañez, Max Risch y Maureen Tee estiman que el flujo ilegal de lavado de dinero en Estados Unidos cada año es de US$182 billones y de US$14.5 billones en México, de esta forma en promedio anual circulan US$10 billones de flujo monetario ilegal entre ambos países (Véase: Nicolas Brien, Kim Danh, María Fernanda Estrada, Julieta Mejía Ibañez, Max Risch y Maureen Tee, 2001,  “A Bilateral Study on Money Laundering in The United States and Mexico”, Working Paper, COLUMBIA/SIPA School of International and Public Affairs, Global Financial Integrity., pp.v-67.

[3]Como sabemos la acusación emprendida por el Congreso de los Estados Unidos hacia el corporativo financiero HSBC en estos días recientes, por haber realizado prácticas de lavado de dinero, en específico transacciones de dinero ilegal entre México y Estados Unidos a través de sus instituciones financieras de orden global, dan cuenta del problema en la dirección en que hemos venido argumentando (Véase, The Guardian, 2012 (Disponible en: http://www.guardian.co.uk/business/video/2012/jul/18/hsbc-laundering-drug-terrorists-video).

DOCUMENTO DEL TEXTO: El crimen organizado, el lavado de dinero y la comunidad política global, el caso del narcotráfico en México, 2000-2012.

martes, 6 de noviembre de 2012

Informe sobre Competitividad Social en México 2012

El reciente Informe sobre Competitividad Social en México 2012 arroja información valiosa sobre las condiciones del mercado laboral en México. Lo notable del Informe sobre Competitividad Social en México 2012 es que está en términos normativos insertado en la visión del economista Amartya Sen sobre la economía del bienestar, entiendo este concepto como un modelo normativo que valora el desarrollo de las capacidades de los individuos para gozar de libertades positivas. Por tal motivo, en este Informe sobre Competitividad Social el trabajo es una dimensión del desarrollo humano, pues de acuerdo con dicho Informe el trabajo se concibe en los siguientes términos:


“Uno de los ‘colores primarios’ del desarrollo es el trabajo. De acuerdo con Sen (1975, 5), hay tres aspectos del trabajo que deben ser considerados: el ingreso, la producción y el reconocimiento. El primero nos recuerda que una parte de nuestro ingreso proviene del trabajo; el segundo, la acción transformativa de las personas, otorga un valor al producto de trabajo; el tercero (el reconocimiento) es de suma importancia, pues indica que el trabajo posee un valor intrínseco para el individuo al ser un factor para el crecimiento de la autoestima y el reconocimiento que se recibe por parte de otros. En términos de desarrollo, la cuestión del trabajo no se limita a tener una ocupación retribuida, sino que también satisfaga las expectativas de vida de los trabajadores.


A manera de ejemplo, la falta de empleo para una persona que ‘vive al día’ significa más que falta de ingresos: puede ser una fuente de deshonra. Asimismo, una persona que, orillada por el desempleo, acepta un trabajo que no guarda debida proporción con sus habilidades o que no es compatible con sus propósitos de vida, puede sentirse insatisfecha (Sen 1975, 5). De este modo, el trabajo refleja la libertad de una persona o grupo para promover y alcanzar una vida valiosa.” (Informe sobre Competitividad Social en México 2012; p.4).


El Informe aquí comentado nos recuerda que de acuerdo con la Encuesta Nacional del Ingreso y Gasto de los Hogares (ENIGH), el trabajo representa uno de los medios esenciales de ingreso, pues representa “cerca del 68% del ingreso total de los hogares” (Informe sobre Competitividad Social en México 2012; p.5).


Otro dato relevante del Informe sobre Competitividad Social en México 2012 es que reporta un aumento del índice de educación de la Población Económicamente Activa (PEA) en 0.74% a nivel nacional, sin embargo en contraste a este aumento, el ingreso de dicha población cayó en 0.39% al segundo trimestre de 2012 si lo comparamos con el mismo período del año pasado.